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viernes, marzo 02, 2018

La Lúz.


La Lúz.

Lucas 11. 33-36.


33 Nadie pone en oculto la luz encendida, ni debajo del almud, sino en elcandelero, para que los que entran vean la luz. 34 La lámpara del cuerpo es
el ojo; cuando tu ojo es bueno, también todo tu cuerpo está lleno de luz;
pero cuando tu ojo es maligno, también tu cuerpo está en tinieblas. 35 Mira
pues, no suceda que la luz que en ti hay, sea tinieblas. 36 Así que, si
todo tu cuerpo está lleno de luz, no teniendo parte alguna de tinieblas,
será todo luminoso, como cuando una lámpara te alumbra con su resplandor.


hoy quiero decirles que podemos guardar apariencia, pero sin la palabra de Dios no logramos cambios y madurez como creyentes.  Su palabra es luz que ilumina el espÍritu/alma contaminado por el pecado. cuando el ojo recibe luz, llena el cuerpo de luz; asimismo, al recibir su palabra de corazón, podemos vencer la codicia, y los deseos carnales del viejo hombre. Podremos superar las tentaciones del diablo, guardar el corazón, y alcanzar la piedad en la vida. Su palabra es verdad y luz que ilumina el mundo, vence las tinieblas y establece el reino de Dios. Algunos alcanzan éxitos temporales cuidando su imagen, pues el mundo juzga por las apariencias, pero al final, los que experimentan la gracia de Dios y cumple su palabra, son luz que ejercen mayor influencia sobre los demás, dejando huellas trascendentes en la historia.

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