JESÚS VENCIÓ LA TENTACIÓN.
LUCAS 4. 1-4.
Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el Espíritu al desierto 2 por cuarenta días, y era tentado por el diablo. Y no comió nada en aquellos días, pasados los cuales, tuvo hambre.3 Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan. 4 Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios.
Mis amados las tentaciones siempre
llegan en el momento de mayor debilidad. La tentación de Jesús nos ilustra las
estrategias ofensivas que satanás usa. Luego de cuarenta días de ayuno, Jesús
tuvo hambre, y satanás usa el hambre física para ponerlo en prueba diciendo:
“Di a esta piedra que se convierta en pan” Jesús tiene el poder de hacerlo,
pero no se deja vencer ante la tentación. Satanás sabe muy bien que Jesús es el
Hijo de Dios, pero usa el condicional “Si eres el Hijo de Dios” para engañarlo, haciéndole pensar
que la única forma de probar su identidad, es convirtiendo las piedras en pan.
Sin embargo Jesús se niega a usar su poder en beneficio propio. La clave para
vencer las tentaciones es reconocer las debilidades que uno tiene, cuidarse de
ellas y hacer a un lado toda codicia, para depender de Dios en todas las cosas.
PREGUNTEMONOS: ¿Cuál es el área más débil de mi vida por el que caigo en
tentación de vez en cuando? Y pidámosle a Dios que nos ayude en nuestras
debilidades.
DIOS LOS BENDIGA.
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